Hoy, día mundial del ahorro de energía, quería explicaros la gran importancia de reducir el gasto energético. Y, aunque llevaba varios meses sin escribir, sin pronunciar unas palabras de esas que vuelan por la mente, inquietas, deseosas de posarse en una hoja que las acoja, el tema en cuestión merecía un post en el blog.
¿Por qué es tan importante ahorrar energía?
Además del ahorro en la factura, la mayor parte de la energía de los hogares actualmente proviene de la quema de combustibles fósiles (petróleo, carbón y gas natural). Como bien sabes, estas fuentes de energía no son renovables y tienen los días contados. No sé si serán 2,3 o 5 años, porque está sujeto a la demanda de los mismos, pero lo que sí es cierto es que, antes o después, se van a acabar.
Por ello, en vez de verlo como algo negativo, aprovechemos la oportunidad que se nos presenta para empezar a cuestionarnos:
- ¿Cómo quiero abastecer de energía mi casa? (aquí la respuesta puede ser fuentes renovables: solar, eólica, geotérmica, hidroeléctrica…)
- ¿Qué sistema quiero fomentar con el uso de mi energía? Sistema monopolizado (grandes compañías tomando decisiones), más democratizado (pequeñas empresas que interactúan y dan un servicio más personalizado al cliente…)
- ¿Qué podría hacer para reducir el consumo energético en mi hogar? Para saber la respuesta a esta pregunta, te invito a que continúes leyendo.
Te voy a hablar de cambios sencillos pero útiles. Muchos de ellos tienen que ver con estar en el momento presente cuando realizamos las cosas, así de sencillo: atención, planificación y organización. Y también tiene que ver con las prisas. Sí, para mí las prisas son las grandes causantes de los mayores impactos sociales y medioambientales.
Así que, sin pausa pero sin prisa vamos a ver cómo reducir ese gasto energético en casa.
¿Cómo reducir el gasto energético en el hogar, sobre todo ahora que la factura energética está por las nubes?
En casa:
- Utiliza luz natural mientras sea posible.
- Desenchufa los dispositivos o cargadores que no necesites (pregúntate también si realmente necesitas todos esos dispositivos o quieras destinar tu atención a otra cosa). Yo ya me he deshecho de 3 electrodomésticos: el microondas (utilizo cocina con gas), la televisión (prefiero proyector con pantalla) y el aspirador (uso la escoba).
- Utiliza bombillas de bajo consumo.
- Controla el uso de la calefacción (15-20º es más que suficiente para una casa). Una opción para reducir el gasto en calefacción es utilizar ropa de abrigo.
- Procura descongelar los alimentos a temperatura ambiente, sin la utilización del microondas.
- Aplicando la economía circular. ¿No sabes lo que es?
En tu sistema energético:
¿Has pensado en tener autoconsumo? Donde puedes abastecerte de tu propia energía. O incluso ponerte de acuerdo con los vecinos y crear una comunidad solar.
En tus compras:
Elige dispositivos eficientes (especialmente en el caso de los electrodomésticos). El etiquetado energético nos ayuda a compararlos y a hacer una elección más responsable y sostenible. Esta también es una forma de conseguir grandes ahorros de energía.
Sea cual sea la decisión que tomes, te invito a que lo hagas no sólo desde el punto de vista de ahorro energético, sino teniendo en cuenta cuál será la mejor decisión pensando a largo plazo. Creo firmemente que el corto plazo nos ha llevado no solo a la fragilidad energética, si no también a la fragilidad económica y humana.
Desde el hogar podemos cambiar el mundo, primero el nuestro y luego el grande, que se construye con tus manos, con mis manos, con las manos de la humanidad. ¡Déjame ayudarte!